I
Bruselas en la
lluvia
Mis manos aquí
Contigo
Despertar reír
Como esas
cosas que faltan
En la poesía
de ahora
Mejor dicho
sobran
Sobre nuestros
Tan sedientos
oídos
Si la poesía
no está hecha
De palabras
Ya lo sabemos
suaves
Las yemas
sobre el teclado
Suave la
diferencia
Tolerada la
semejanza
Entre mi madre
muerta
Y la misma ya viva
Entre Bruselas
Y mi
habitación azul
Con lluvia y conmigo
Con su corazón
II
El sonido
busca otro sonido
Como mi alma
hasta ahora
Busca mi
cuerpo
En ti
Me temo que he
sido feliz
Más feliz que
dios
Y que el
diablo
Si
contemplaras conmigo
La tarde ancha
Si estos dedos
me obedecen
Te hago la
tarde y te hago
Los aplausos
dentro de tus venas
Pero si no he
venido
Sino a saludar
a la audiencia
Por un rato
Y a lo que
salga
Una forma
Donde apenas
reconozco mis manos
Tocando la
poesía
III
Altas las
manos
Con el índice
el tema
Negro sobre
negro el tema
Que quedará
Entre
paréntesis
Expandir pedir
desear
Hasta las
últimas consecuencias
De las manos
Hasta esta
noche
Del corazón
Pero
Son tuyos soy
tuyo
Para desearte
Mis dedos
Y lo que
despierta mis manos
Lo que
zambulle
Nuestro
espíritu
Y lo que lo
solaza allí
En lo hondo en
lo negro en lo oscuro
Del deseo
Hasta las
últimas consecuencias
Te he amado
Y el tema
Metido con los
índices duros
Contra la vida
Siempre es el
mismo siempre
Es uno
Y es acaso todos
IV
Preferir
preferirte
Llama oscura
Inerte manso
inerte
Y otra vez
desarmado
Ante tus
caricias
Parados en la
ciudad
En el cruce
En la baldosa
De aquella
avenida
La mirada
cambia su lógica
Miras lo que
sistemáticamente
Escondo
Dejar entrar a
las palabras
Porque ya no
importa
Si son o no
son palabras
Si están de
más
O si acompañan
al sonido
Al deseo
Pero no me
atrevo a decir
Ni alma ni
democracia
Porque
probablemente
Pierda el
poema
Y yo el
sentido
Escribo como
lo que no soy
Borrado entre
estas teclas
De la máquina
libre
De pensar de
llegar a algún puerto
Piso las
palabras mejor
Y saco la
lengua
Y termino me
interrumpo
Donde puedo
querido lector
Ingenuo como
yo
Manso y
vulnerable
Como yo y no
como
V
Por último tus
manos
Y tus pies
bajo la lluvia
De Bruselas
Bajos ante la
lluvia
Pero qué se le
va a hacer
Si nos
zambullimos y nos
Morimos por
acá
Y aún así
secretamente
Vivimos
Por encima de
dios y del diablo
Que no
escriben poesía
La que nos
llevó al río
La muy
inocente
Y nosotros
desarmados
La amamos
Inocentes la
amamos
Como humanos
la amamos
VI
La desdicha
toca
A nuestra
puerta
Pero también
la poesía
Dedos de
yacaré
Son los que te
hunden
Las vértebras
en
La poesía
Monstruo verde que no cesa