lunes, 16 de agosto de 2021

Climber (Enredadera): Pedro Granados, translated by Leslie Bary

 

https://www.beltwaypoetry.com/?p=53132&preview=1&_ppp=5460d9c5f0

Climber

I
Grab that pole and soar like a creeping vine
The night cold will not bother me at all
The relentless frost of dawn
If I eat drink breathe
It is grace already
Toward my instinctual goal
Sleepwalking automatic
To one side papers packages debris
Foul air
Dense and impure words
Between my root and me
Between that pole and me
Visible and invisible threads
To climb slowly like a sloth
True and sure like a snake
Among those filaments
The unseen strand
That put me back in Lima
That threaded me to your love
Blind night the one that sees
Beyond our eyes
Now that it wets my cheeks
Mud and rough concrete
I crawl upon
With my gaze and feel with thought
With the half-open corners of my lips
And part of my tongue yes indeed
With my breath clogged by mud
Which is the earth I breathe
The same as a dog
Just like the hyena
Gobbling its prey in desperate pieces
Like the little bird who can take no more
And adds another lump to the earth
I head on and climb then
Guiding myself by the voice that calls me
By the one who shouts my name
And stretches loving arms out to me
And disappears again
Or delays
Because that’s how she gets me to keep climbing
Like the creeping vine that I am
Mud flowers that we all really are
Each one
And never only poets

II

Reach for that nail
It will be a bit tough
Peninsula exposed to the sea
Wave inside
Snail reptile
Extension of the shadow
Gradual
But sure and inevitable
Toward what we need
The wave or nothing
Nothingness or the wave
Naked in socks
Or altogether naked
As on a set of scales
My fish
My hands steady
Greedy
“I love your style”
Against those street haunches
Incense caught in skin
That I am heading for now
Towards which against everything
I guide myself
As if
Toward a parallel heart
Or parallel breath
Remember it remember it
A loose sun
Untied for a time from its other
Night against night my days
Until perhaps
Reaching for that nail
And spilling ourselves down from there
Pure wings on air
Hanging swinging
Pure green on an untouched landscape
All trembling besides
All accomplished

Enredadera

[Agarrar mi guía y elevarme]

Agarrar mi guía y elevarme tal una enredadera
El frío nocturno no será nada tampoco
La escarcha inevitable del amanecer
Si como si bebo si respiro
Ya es una gracia enorme
Para mi objetivo inconsciente
Sonámbulo o en automático
A un lado papeles bultos desperdicios
Aire viciado
Palabras densas e impuras
Entre mi raíz y yo
Entre mi guía y yo
Hilos visibles e invisibles
Para escalar lento como el perezoso
Seguro y cierto como la serpiente
Entre aquellos últimos
El hilo invisible
Que me puso de nuevo en Lima
Que me ensartó otra vez a tu amor
Noche ciega la que ve más allá
De nuestros ojos
Ahora que humecta mis mejillas
El barro e incluso el hormigón
Sobre el que me arrastro
Con la mirada no siento menos con el pensamiento
Con las comisuras entreabiertas de mis labios
Y parte de mi húmeda lengua eso sí
Con mi respiración taponeada por el lodo
Que es tierra la que respiro
Igual que el can
Igual que la hiena
Cuando engulle a trozos desesperados su presa
Igual que el pajarillo que no pudo más
Y añade un grumo más a la tierra
Enfilo y trepo entonces
Me oriento por la voz que me llama
Por la que pronuncia mi nombre
Y me extiende sus brazos amorosos
Y desaparece de nuevo
O tarda
Porque así me va animando a subir
Como la enredadera que soy
Flores de fango que en realidad somos todos
Cada uno
Y jamás únicamente los poetas

[Alcanzar aquel clavo]

Alcanzar aquel clavo
Será algo difícil
Una península al mar expuesta
Ola dentro
Reptil caracol
Extensión de la sombra
Paulatina
Pero segura e inevitable
Hacia aquello que necesitamos
La ola o nada
La nada o la ola
Desnudo en calcetines
O del todo desnudo
Y como sobre balanzas
Mis peces
Seguras mis manos
Golosas
-me encanta tu estilo
Contra aquellas nalgas de barrio
De incienso de piel de esclava
Hacia las que enfilo ahora
Hacia las que contra todo
Me oriento
Como si hacia un corazón paralelo
Se tratara
O respiración paralela
Recuérdalo recuérdalo
Un sol suelto un tiempo
Del otro desprendido
Noche contra noche mis días
Hasta acaso
Alcanzar aquel clavo
Y desde allí derramarnos
Alas puras sobre el aire
Batientes suspendidas
Puro verde sobre un paisaje intocado
Todo trémulo por demás
Todo cumplido



martes, 10 de agosto de 2021

A un joven poeta todavía

 

Ukulele o charango o ambos.  Percibo que has alcanzado una frontera que divide lo acostumbrado de un otro posible.  O, lo que es lo mismo, una página liminar donde ya no te convence todo lo anteriormente elaborado y tienes expectativa de lo que vendrá.  Aquel amor que en tus versos es un pretexto para bucear, constituye más bien ya un tópico, algo incluso molesto del que debes sin mueca alguna deshacerte.  Tus potencias creativas y tu imaginación están allí, pero falta una chispa que no sustituye la reflexión que ahora atizas.  Lo tuyo es estar loco, siempre loco, mantenerte a salvo  –al menos para la poesía– en este noble estado de flotación.  Encarna en tu gata, pero no escribas sobre ella, esta puede ser una entrada decente a un mundo tan necesitado de aquello hoy en día.  Ni utopía ni distopía, sí posantropocentrismo.  Rechaza todo gesto didáctico, lo tuyo es la creación.  Encuéntrale la vuelta a la política, juega a espaldas de los defensores de la ética; aquel espacio creado sobre el gramado, justo frente al arco rival, es por donde debes precipitarte como una tromba.  No se niega la política ni la ética, pero se la mira al trasluz de la poesía.  En otra época se calificaban y punían las intenciones; sin embargo, hoy no existiendo las intenciones, tampoco éstas podrían evaluarse.  Una cartilla de buen comportamiento rige nuestras vidas, las públicas y las privadas.  Nos vamos  quedado sin aire para respirar y, el aire, es lo mínimo para que pueda sobrevivir también la poesía.  Que es el viento mismo, la gracia abundante, la rotunda y fiera belleza.  Aunque esto, hoy en día, pareciera que tampoco lo sabemos aquilatar.  Y sólo anhelamos encajar en ser ecológicos, holistas, “buenas personas”; previsibles en todo, en suma.  ¿Qué cómo andan los poemas que me has enviado?, pues bien y ahora mismo publico en mi blog  alguno de ellos.  Pero no por las huevas sabes tocar el ukulele. 

(A los jóvenes poetas, sobre todo de mi país, sepan tocar o no el ukulele)

lunes, 9 de agosto de 2021

HUMAREDA(S)


Para Luis Jaime Cisneros, i.m.

Como su nombre lo indica

Incienso

No hablo aymara ni quechua

Pero entiendo perfectamente

La mueca del beodo

Del que lleva el íntegro de su mundo interior

A la playa desierta de su  mirada

Lo oculto jamás es mayor que lo evidente

Y el hombre acaso sea una bolsa de mierda

Lo dijo un español, no Goya ni Quevedo

Un muchacho que atendía por ahí

En su bodega de ultramarinos

Aunque Humareda serían las heces del ángel

Como la poesía de Martín Adán

Otro borracho que a veces permitía

Oteáramos su chispa

Humareaba tras el mismísimo “orgasmo de Dios

Hecho para cisma”

En fin, que muy en el fondo Víctor y Martín

Serrano y costeño

Son exactamente lo mismo

Como que ambos se meaban

Dentro de sus pantalones

O que en el fondo

No les interesaba ni hembra ni varón 

Imantados a la maniobra

Aprendida y mejorada con la práctica

De encaramarse de un salto

Sobre su alfombra mágica

Y coincidir  ambos sobre el cerro más próximo

De Lima

Para contemplar desde allí

No sin discreto deleite

Lo bien hecho que estaba el mundo (Jorge Guillén dixit)

Dos zorros jugados a cuchichear

Lo que ya de sobra conocían

Y sin perder de vista jamás 

El cierre de la chingana más próxima

Ni varón ni varona

Como le acomodó también

Aunque con sus altibajos

A Jorge Eduardo Eielson

“Sucede que me canso de ser hombre/

y también de ser mujer”

Pero sin que hallemos tal romanticismo

En la catadura clásica de Adán o de Humareda 

Atentos los dos a su ponche de invierno

Tanto como Góngora, en aquella inolvidable letrilla,

Lo estaba a sus  castañas asadas

Que yo no sé quechua, aymara tampoco 

Ni entiendo cosas de borrachos

 Únicamente en español


©Pedro Granados, 2021


 

martes, 3 de agosto de 2021

 


Confrontado ante la poesía

y ante mí mismo. Hondos

costados los del mar. Oscuros

sus sobresaltos.

Una herbívora gaviota lo sobrevuela,

me sobrevuela.

Confrontado con mis seres queridos,

con mis queridas amistades.

Haberlos traicionado a todos.

Menos en la desnuda lágrima.

Menos en el deseo incandescente.

Yo soy otro hombre ya.

Alguien que abre puertas

y se marcha. Algún otro que no busqué.

Que vino así y me fue tiñendo

desde los calcetines hasta el gorro.

Alguien que abre su puerta

y se va. Que ya se marcha para siempre.

Pedro Granados

 

                               Confrontado diante da poesía

e diante de mim mesmo. Profundas
bordas do mar. Escuros
os seus sobressaltos.
Uma herbívora gaivota sobrevoa.
me sobrevoa.
Confrontado com meus seres queridos,
com minhas queridas amizades.
Tê-los traídos todos eles.
Menos na lágrima desnuda.
Menos no desejo incandescente.
Já sou outro homem.
Alguém que abre portas
e vai embora. Algum outro que não procurei.
Que veio assim e foi me tingindo
desde as meias até o gorro.
Alguém que abre a porta
e se vai. Que vai embora para sempre.

Tradução de Antonio Miranda

Extraído de

POESIA SEMPRE. Número 28. Ano 15 / 2008.  Rio de Janeiro: Fundação Biblioteca Nacional, 2008.  246 p.     Editor Marco Lucchesi.  Ex. bibl. Antonio Miranda